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No obstante, el campo de la Salud al estar involucrado directamente con seres humanos es una disciplina dinámica y cambiante, debe adaptarse a las necesidades de la población y por tanto mostrarse abierta al surgimiento y evolución de enfoques de forma continúa; la Psicología debe tener un papel protagónico en dicha evolución. En el presente artículo se pretende mostrar algunas de las principales áreas de acción de la disciplina, sin que esta sea una revisión exhaustiva, pero si con el objetivo de mostrar las posibilidades de acción actuales e incentivar el desarrollo de opciones novedosas. El grupo de mujeres surgió desde esta lógica horizontal como propuesta de las mismas participantes que fue recogida para organizar un espacio comunitario de cercanía e intimidad en el que abordar inquietudes comunes, masajearse, maquillarse e intercambiar objetos. Se hablaba de vivencias sobre la sexualidad, amores, menstruación, miedos y necesidades desde una perspectiva relativa al «ser mujer» como manera de estar en el mundo. La participación del grupo se construyó como voluntaria, variable y abierta a las posibilidades y el deseo de cada compañera el día de reunión.

Servicio de Rehabilitación Comunitaria (SRC)

  • El director del CAP La Florida, Sebasti Calero, ha explicado que hay una serie de factores que "condicionan la salud", como el nivel socioeconómico, la alimentación, la educación, el ejercicio físico y, en definitiva, determinados hábitos de vida.
  • Además, estas iniciativas fomentan la cohesión social y el fortalecimiento de redes de apoyo, esenciales para el bienestar emocional.
  • Concretamente, comentaban la opción de participar en grupos terapéuticos para trabajar necesidades y motivaciones compartidas por las mujeres, como son el trabajo, la familia u otros intereses.
  • El futuro de la salud mental comunitaria es prometedor, especialmente con los crecientes debates sobre la importancia del bienestar mental en la sociedad.

Con planes de trabajo individuales, se busca la máxima inserción comunitaria, promoviendo la autonomía y acompañamiento de forma integral (familiar, social, sanitaria, jurídica, laboral). El SAI cuenta con el apoyo del Departamento de Derechos Sociales e Inclusión de la Generalitat de Cataluña mediante la convocatoria ordinaria de subvenciones por entidades sociales (CONVO). Las motivaciones para acceder y mantenerse en tratamiento se relacionaban con la intención de mejorar su situación social y de salud. Las participantes, tras largos periodos de consumo de drogas y acumular experiencias negativas, encontraban el CAS como un espacio donde recibir una cobertura a sus necesidades. Específicamente, accedían al tratamiento con motivo de hacer frente a malestares que relacionaban con trastornos del estado del ánimo (ansiedad, depresión, estrés, etc.), más allá de los propios problemas de salud por un consumo intenso de drogas.

Vida comunitaria para todas: salud mental, participación y autonomía. Informe SESPAS 2020

Para abordar esta realidad, nos encontramos con que, por una parte, los recursos actuales son, por un lado,o insuficientes -solo un 50% de la población infantil y juvenil con problemas de salud mental es atendida por los CSMIJ y nos hallamos con largas listas de espera- servicio psicológico para refugiados Catalunya y, por otro lado, nos falta un modelo integral de atención con un enfoque preventivo y comunitario. Esta situación hace que muchos niños, niñas y adolescentes queden desatendidos, o bien reciban una atención fragmentada y reactiva, centrada exclusivamente en el diagnóstico y el tratamiento farmacológico. A pesar de los esfuerzos por desestigmatizar la atención en salud mental, muchas personas todaví­a sienten temor de buscar ayuda por miedo a ser juzgadas o malinterpretadas.

Qué son las intervenciones en salud mental comunitarias

Tiene como objetivo prevenir, asistir y tratar los trastornos y alteraciones mentales, psicológicas y psicopatológicas. Las creencias y los valores sobre la salud mental pueden diferir significativamente entre culturas, lo que puede dificultar la implementación de programas estandarizados. Es esencial que las intervenciones sean culturalmente sensibles y adaptadas a las particularidades de cada comunidad para asegurar su aceptación y efectividad. Promover el bienestar social y de salud de las mujeres de mediana edad del Concejo, fomentando la mejora en sus condiciones de vida de manera integral y logrando su participación activa en la comunidad.

Estos permiten incorporar prácticas de promoción de salud mental comunitaria en el primer nivel de atención de salud desde una perspectiva crítica, abierta a la complejidad y basada en el principio de que la comunidad es el principal sujeto activo de transformación social. En este cambio de modelo resultan básicas la participación y la implicación de las personas diagnosticadas como agentes del proceso. Diferentes documentos4,5 recomiendan que las personas afectadas y sus familiares participen en la construcción de políticas y en la evaluación de los servicios, pero esta recomendación responde más a una mirada neoliberal, adaptada por muchos servicios de salud mental que consideran la participación como un medio más que como un fin5. Según Arnstein18,19, este tipo de participación sería simbólica, entendida como consultas a formar parte de comités, pero solo de manera instrumental, aceptando algunas propuestas, pero sin que las personas lleguen a ser partícipes de las decisiones. Sin desmerecer estas formas de participación, sí criticamos que en ocasiones se trata de espacios clientelistas y de cooptación, para cumplir ciertos criterios exigidos a las administraciones. Entendemos la participación como un proceso en el que se gana control sobre las decisiones que afectan a la propia vida y que fomenta la vinculación con la comunidad donde vivimos, lo que tendrá un impacto en nuestra salud y bienestar20,21.

De tal manera que esta revisión contribuya a que los profesionales de la salud cuenten con un marco común respecto a esta disciplina. Además, estas iniciativas fomentan la cohesión social y el fortalecimiento de redes de apoyo, esenciales para el bienestar emocional. Crear una comunidad que se unifica en torno a la salud mental fortalece los lazos interpersonales y genera un sentido de pertenencia. De igual forma, estas iniciativas pueden contribuir al empoderamiento de las personas, dándoles las herramientas necesarias para manejar sus problemas, lo que lleva a una mayor autodeterminación y control sobre sus vidas. El SAI (Servicio de Acompañamiento Individualizado) ofrece espacios individuales y grupales a personas en situación de especial vulnerabilidad a causa de su situación personal y social, agravada por la prevalencia de un diagnóstico en salud mental y/o adicciones y/o VIH-Sida.

Dichas publicaciones produjeron la transformación de la asistencia psiquiátrica en un modelo integrador y desinstitucionalizador mediante cambios conceptuales, políticos, legislativos y técnicos7, 8, que permitieron la transición a una nueva era. Plantearon la asistencia de la salud mental en atención primaria de salud9 sin que ello implicara un conflicto, sino la confluencia de la acción comunitaria desde una perspectiva participativa de la comunidad10. Sin embargo, las instituciones sanitarias autonómicas lo abordaron con escaso éxito a causa de las desigualdades, entre otras, en el calendario de las transferencias de las competencias sanitarias desde el gobierno central, en las voluntades políticas regionales y en el propio compromiso de los/las profesionales7, 8. Es un dispositivo especializado, pionero y de referencia en todo el Estado español, que atiende personas que sufren trastornos de ansiedad de alta complejidad. Se trata de un servicio suprasectorial que responde a las necesidades de la red de salud mental y que atiende a las personas mayores de 18 años con orientación diagnóstica primaria de trastorno de pánico acompañado o no de agorafobia, fobia social, fobias específicas, trastorno de ansiedad generalizada y trastorno obsesivo compulsivo.

Características y modelos de intervención comunitaria 1.1. Orígenes de la psicología comunitaria

En este percibían apoyos con otras usuarias del CAS, sentirse parte de “algo” (pertenecer), y la oportunidad de compartir sus experiencias, generando así una red de apoyo entre iguales. Otra de las claves de la adherencia al tratamiento era establecer una relación de ayuda con las y los profesionales del CAS. Las participantes referían tener buen vínculo con las y los profesionales de psicología, seguidos de los de enfermería, con las cuales percibían tener espacio de escucha, empatía, autoconocimiento, respeto y apoyo. El estudio fue diseñado por las dos autoras de este artículo, una psicóloga con cinco años de experiencia en el campo de la salud mental y un doctor en antropología y enfermero especialista en salud mental con una experiencia de 20 años. Durante los primeros meses de la investigación, la autora principal realizó un acercamiento con las posibles participantes del estudio y el entorno de su tratamiento. Junto con el segundo autor, que no participó directamente en la recogida de datos, compartió observaciones y reflexiones que fueron discutidas en reuniones para diseñar la estrategia de muestreo y el guion para la entrevista semiestructurada.

Así como su implicación comunitaria y promover la coordinación de los recursos sanitarios y no sanitarios involucrados en el proceso de atención. Y ello porque la práctica integral de la SMC desde la APS desborda el campo específico de la psicopatología. Algunos estudios como los de Ciompi, demuestran que conocer la historia del paciente y su participación en un proyecto vital compartido son más efectivos que los fármacos y el internamiento (16). Los autores de la escuela de medicina social de Ecuador manifiestan la importancia de ampliar la visión con la cual se entiende actualmente la salud en el país andino; y señalan el deterioro de estos servicios en tanto se brindan bajo la lógica del paradigma biomédico y unicausal que, en definitiva, no logra dar solución a los crecientes problemas de salud (11). Este trabajo se propone conocer el desempeño de la psicología en los equipos de salud mental de los Centros de Atención Primaria de la Salud de la ciudad de Mar del Plata, en términos de autopercepción, de la opinión de profesionales de otras disciplinas concurrentes, directivos de estos centros y de la población consultante. Para alcanzar este objetivo se utilizarán técnicas de recolección de datos cuantitativas y cualitativas, destinadas a recabar información relevante acerca del desempeño de la psicología en el Primer Nivel de Atención de la salud.

Además, es necesario el legítimo compromiso con las personas usuarias de los servicios de salud mental, tanto en las opciones de tratamiento individual como en la formulación de políticas, involucrándolas en comités asesores de salud mental, órganos de monitorización y estructuras de defensa de pacientes y familias11. La promoción de legislaciones que aseguren financiamiento y acceso a salud mental es vital para garantizar que todas las comunidades tengan los servicios necesarios. Polí­ticas que aborden la salud mental en las escuelas, lugares de trabajo y espacios públicos también contribuyen a crear un entorno que favorezca la salud y el bienestar. Además, involucrar a la comunidad en la creación de estas polí­ticas garantiza que se adapten a las necesidades especí­ficas de cada grupo.

Gestión i Acción participativa

Esta presentacion se centra en los resultados de la exploracion de las metas terapeuticas que dichos grupos plantean como relevantes en su tarea clinica. Dado una Lista de Metas Terapeuticas – 13 posibles metas terapeuticas, se les pidio a 43 participantes, residentes y concurrentes psicologos y medicos en salud mental, que seleccionaran aquellas que, a su criterio, fuesen las cinco mas importantes. Existe un alto consenso en relacion a las metas senaladas como las mas importantes por la mayoria de los participantes, tanto medicos como psicologos. Estos resultados resultan similares a lo indagado en estudios anteriores con residentes del sector publico y con psicoterapeutas cognitivos y psicoanalistas. Programa de prevención, soporte y atención a los profesionales del cuerpo de la Guardia Urbana de Barcelona, creado con el Ayuntamiento de la ciudad.